martes, 28 de agosto de 2012

La constancia y la capacidad de sacrificio son la mejor receta del éxito.
 
Los errores más frecuentes de Empredendores y cómo evitarlos:

Con un desempleo en España que supera los 5 millones y medio de personas, no es de extrañar que cada vez sean más quienes apuestan por el autoempleo para salir del paro. No obstante, a la hora de poner en marcha un negocio, hay que tener en cuenta muchos aspectos.
Dedicación, una buena idea, inversión económica, obtener financiación, conocer los requisitos legales y el mercado…
No es fácil sacar adelante un proyecto, aunque una buena formación puede aportar las claves para lograrlo. Además, te recomendamos que sigas estos consejos:
  1. No tires la toalla a las primeras de cambio. La perseverancia es básica si quieres llegar a buen puerto. No olvides que el éxito se mide si se compara el número de fracasos con el de los éxitos cosechados: si caemos tres veces pero nos levantamos cuatro, habremos triunfado. Por eso, no rendirse resulta fundamental.
  2. Elabora a conciencia tu plan de negocio (incluidas la presentación y la ortografía). Si no es así, es probable que le entidad bancaria y los posibles inversores que lo evalúen decidan no involucrarse en el mismo. Para ello, no basta con utilizar el corrector automático de tu editor de textos: confía el documento íntegro a un experto para que revise también el léxico, la sintaxis y la gramática. Por otro lado, no te olvides de ofrecer una descripción detallada del proyecto, analizar la competencia y aludir a las oportunidades de negocio.
  3. Fórmate en el ámbito empresarial. Si careces de preparación previa, apuesta por cursos de especialización o programas de posgrado que te brinden los conocimientos necesarios, sobre todo por lo que respecta a las acciones comerciales. Es imprescindible que sepas cómo hacerte un hueco en el mercado, captar clientes y poner a su alcance un producto o servicio que realmente responda a sus necesidades.
  4. Sé innovador. De lo contrario, corres el riesgo de que tu propuesta pase totalmente inadvertida y no suscite interés.
  5. Cuidado con los familiares y amigos. El estrés asociado a este proyecto puede dañar las relaciones personales. Si optas por emprender con tus allegados, mantén siempre la cabeza siempre fría para evitar problemas extralaborales.
  6. Ten dinero a punto para afrontar imprevistos. Ordenadores que no funcionan, proveedores que no cumplen con los plazos establecidos, los pagos trimestrales a Hacienda, problemas en el local… Antes de embarcarte en tu nuevo negocio, reserva una cierta cantidad de dinero para poder salir airoso de posibles gastos extraordinarios.
  7. Fideliza a tus clientes. No te centres sólo en ampliar tu cartera: mima en todo momento a los clientes que ya tienes, ya que éstos constituyen tu verdadero sustento.
Si, pese a todo, tu negocio se va al traste, analiza las causas que te han conducido al fracaso. De este modo, tendrás presente cuáles han sido tus errores y evitarás repetirlos. Además, recuerda que este no es el final, sino un episodio más de tu vida profesional. Si recoges las piedras que encuentras por el camino, un día podrás construir un castillo.

Planifica bien tu negocio desde el principio y acertarás!